Dulcepsicópata Paladín
Mensajes : 2149 Fecha de inscripción : 27/01/2011 Localización : África Tropical Empleo /Ocio : Cultivar mientras canto la canción del ColaCao Humor : Harto pésimo
| Tema: Re: Capítulo VI Dom 27 Feb 2011, 22:20 | |
| <<CAPÍTULO 6>> -Hiciste un buen trabajo anoche, Kero me lo ha contado todo, le dijo Nélcar al cazador. -Casi acabo cómo aquellos pobres diablos de la pira. -Lo se, y te pido perdón por ello. Kero y Axo son los dos miembros más jóvenes de la orden, los demás somos ya muy viejos para esa clase de misiones y tu parecías experimentado. Has resultado ser de gran ayuda y por ello quiero que aceptes estas cien monedas de oro. -Bueno, gracias, dijo el cazador cogiendo la bolsa de dinero, la armadura ha quedado destrozada, la he dejado allí en esa tienda -No te preocupes por ello. Si piensas pasar por la civilización estos días lo más seguro es que te recluten para la milicia, así que he firmado esta carta de recomendación para que puedas evitarlo. -Gracias, me será de gran ayuda, comandante. ¿A cuánto está el asentamiento más cercano? -Carfa está a veinte kilómetros de aquí, si sigues ese camino llegarás directo. El condestable Inubis está al mando del alfoz y de la ciudad. Preséntate con mi carta y no te ocurrirá nada. -Muy bien entonces me marcho. -Nosotros tenemos órdenes de asegurar los caminos, así que nos quedaremos por la zona durante un tiempo. Que Innos guíe tu camino, extranjero.El camino continuaba a la orilla de un río de aguas tranquilas, proveniente de las montañas. Tras caminar durante dos horas avistó en el horizonte la ciudad. Se hallaba en una hondonada, provocada por el mismo río del camino que, a su paso, atravesaba la ciudad por uno de sus extremos. Carfa, al igual que todas las ciudades del valle, tenía anchas murallas con torreones, calles estrechas y casas de piedra con entramados de madera. La ciudad fue una de las primeras que se fundaron en el reinado de Aszerón. El viejo puente de tiempos de las tribus de Adanos se convirtió en un importante nudo de comunicaciones y alrededor de él surgió la ciudad. Su economía se basó durante siglos en el comercio y en las minas de hierro de la Meseta de Zerios. Sin embargo, cuando el hierro de las minas se acabó muchos de los habitantes tuvieron que emigrar a otras tierras, en busca de trabajo. El grupo más grande fue hasta la isla de Khorinis, donde llevaron la cultura del continente, modificando la ciudad al estilo de los asentamientos del valle de Laran. A escasos metros de la muralla, unos soldados de la milicia estaban ejecutando a unos hombres del Culto, cortándoles la cabeza y metiéndolas en un saco. Uno de los milicianos se dio la vuelta y detuvo al cazador, éste se limitó a entregarle la carta del comandante Nélcar. -Muy bien, continúa, no hay nada que ver aquí.Mientras contemplaba el nefasto espectáculo, el cazador se dio cuenta de que aquella escena tan desagradable no le hacía sentir nada en absoluto. El hecho de ver humanos siendo decapitados le dejaba impávido, cosa que le extrañó y le hizo plantearse si se había convertido en un monstruo, a pesar de que fueran del Culto. La guerra era demasiado cruel para lamentaciones. Nadie era un santo. Cuando pasó el viejo puente y llegó a las puertas de la ciudad observó que dos escultores tallaban encima de la puerta el escudo del rey Rhobar. Cuando los guardias le detuvieron éste les enseñó la carta. -Está bien, puedes pasar, si quieres enterarte de algo ve a la plaza al fondo de la calle, el alguacil está a punto de leer el bando. -Lo haré, graciasUna gran muchedumbre se arremolinaba en torno a la plaza, donde el alguacil subido a una mesa se disponía a hablar. -¡Atención, ciudadanos, escuchad los sucesos y las nuevas de Myrtana, por orden explícita de Lord Kerag, conde de Laran. Primer orden del día: Anoche el condestable Inubis, paladín del rey huyó de la ciudad, llevándose consigo gran cantidad de dinero. Se ha descubierto que practicaba ritos ocultos a Beliar y se le ha puesto en búsqueda y captura. Se le vio por última vez esta mañana al norte en dirección al mar de Ubáid. Se cree que busca una embarcación para salir del continente. El paladín Ivan salió esta mañana en su búsqueda con un grupo de soldados. Al ciudadano que le encuentre o lo mate se le recompensará con quinientas monedas de oro. Debido a las circunstancias, Lord Tarion ha sido elegido nuevo condestable de Carfa. Segundo orden del día: El traidor Anzra Thäs, aliado de los demonios y oscuro siervo de Beliar ha sido capturado mientras quemaba villanamente las granjas del Gurión, en la región de Xsathra. El infame traidor será llevado a Vengard donde será ejecutado y mutilado. Sus descuartizados miembros serán paseados por cada rincón de Myrtana tras su ajusticiamiento. Tercer orden del día: Los orcos han invadido la región de Onaris. Como ya se sabe, hace dos noches los orcos invadieron la región de Mirna y algunas partidas de orcos llegaron hasta el valle, por tanto, se ruega a todos los ciudadanos que no abandonen la ciudad mientras siga el estado de alarma. Cuarto orden del día: El ladrón Zordo, tras ser condenado ayer, será ahorcado en un par de horas en la plaza de la ciudad. Eso es todo. ¡Larga vida al rey, el ungido por Innos, Rhobar I de Myrtana! Mientras la muchedumbre gritaba, el cazador se marchó de la plaza y entró en la taberna que había cerca de la entrada. La taberna estaba limpia pero unos cuántos borrachos le daban un aspecto roñoso. -¿Tienen camas?, preguntó el cazador al hombre que estaba detrás de la barra. -Hay camas, hay comida, y hay información si tienes dinero en los bolsillos. -En ese caso quiero una de las camas, para una noche, dijo soltando unas monedas en la mesa, haciendo despertar a uno de los borrachos que estaban sentados en la barra y que se le caía la baba. -Muy bien señor, tenga la llave, es la primera, arriba a la derecha. -Ponme una jarra de leche, y si tienes, carne de ratopo -Claro, señor.Mientras comía, el cazador se puso a leer el diario. El primer indicio era un bosque de hayas cercano al río Yszen, que llevaba a una enorme explanada donde crecían unas flores anaranjadas altamente tóxicas, pues uno de los caballeros que acompañaban a Bardas había cogido unas fiebres tras ingerirlas. El cazador se preguntó qué habría hecho a un hombre comer flores, al ser tan conocido que no son comestibles. En sus viajes por los Llanos de Tabriz nunca había visto flores anaranjadas, así que tal vez alguien podría indicarle dónde estaba ese lugar. Sin embargo psicológicamente se sentía cansado así qué decidió pasar una noche en la ciudad. Tras comer, subió a su habitación y dormitó durante dos horas. Los gritos de la muchedumbre le despertaron. Al asomarse al balcón vio al ladrón en la horca dando espasmos. Estaba muerto. Durante diez minutos el cadáver siguió haciendo movimientos espasmódicos. El cazador había visto esa reacción en muchos animales y no le sorprendió lo más mínimo. Bajó las escaleras y vio la taberna bastante llena. Cogió al tabernero por el hombro y soltando unas monedas le preguntó: -¿Conoces a alguien que pueda indicarme cómo llegar a un lugar concreto del valle? -¿Un lugar concreto? ¿qué quieres decir? -Quiero decir un lugar que no se su nombre pero lo puedo describirEl tabernero se le quedó mirando aburrido -Conozco a alguien, pero yo también he olvidado su nombre. -¡No te andes con juegos payaso, ya te he pagado, dime quién!, dijo el cazador cogiéndole por el cuello. -Muy bien, muy bien, no quiero problemas. Su nombre es Graír, es rubio y lleva largas patillas, vive al lado de la puerta sur, es fácil de reconocer.El cazador le soltó y se fue de la taberna. Unos milicianos estaban bajando al ladrón de la horca y la muchedumbre ya se había marchado. En una de las calles encontró una barbería. Tenía el cabello y la barba muy larga, así que decidió entrar y dejarse el peinado que había puesto de moda el rey: el pelo recogido en una coleta de cinco centímetros. La mayoría de la gente lo llevaba y además identificaba como leal vasallo del rey. También decidió recortarse la barba y dejarse perilla sin bigote, aunque no lo hizo por imitar a Xardas, simplemente porque le quedaba bien. Cuando salió de la tienda vio justo enfrente una tienda de ropa. En la puerta de la tienda y por toda la ciudad habían puesto carteles que obligaban a todos los hombres experimentados en armas que estaban exentos de unirse a la milicia a llevar una prenda o un pañuelo de color rojo en el pecho, el hombro o el brazo, para no confundirlos con miembros del Culto. Entró en la tienda y compró una pieza de armadura para el hombro y el brazo derecho y un pañuelo rojo que se puso atado en el brazo izquierdo. Al acercarse a la puerta sur, una mujer muy guapa, y bien vestida se le acercó. -Hola guapo, me llamo Alina, aunque puedes llamarme cómo quieras... ¿quieres divertirte?, dijo haciéndose la avergonzada. -Mmm... me encantaría. Dime cuánto me costaría la diversión, Alina? -Pues por sólo sesenta monedas de oro, puedo jugar contigo toda la noche... -¿Sesenta? Eso es casi el doble de lo que se paga en mi región. -Si lo pagas, sabrás en lo que te has gastado la diferencia, las chicas a este otro lado de las montañas conocemos lo que realmente gusta a los hombres. -No lo dudo, dijo el cazador mientras pensaba si pagar o no. Cuando ya sacaba su bolsa la meretriz le dijo: -¿Cuánto pagas en tu región? -Cuarenta monedas, dijo extrañado el cazador. -Vale, lo haré por cuarenta, todos mis clientes son viejos asquerosos del barrio alto y hace mucho que no tengo compañía de alguien de mi edad... -Vaya gracias -¿quieres hacerlo ahora? -Claro. -Pues sígueme.Alina le llevó hasta una casa llena de mujeres y le subió hasta una de las habitaciones. *** A la mañana siguiente se levantó, realmente había sido mejor que cualquier otra vez en Tabriz. Alina seguía durmiendo. A un lado de la cama le dejó otras veinte monedas. Al salir del lupanar, encontró a Graír sentado en un banco, cerca de la puerta sur. -He oído que conoces bien el valle, le dijo el cazador -Es posible, dijo Graír -Necesito encontrar una explanada cercana a la ciudad de Laran donde crecen flores anaranjadas. -¿Cuánto me vas a pagar? -¿Cuánto quieres?, dijo el cazador sabiendo que sólo le quedaban diez monedas -El lugar que buscas está a diez días de aquí. Si quieres que te lleve tendrás que pagarme diez monedas por cada jornada de viaje
En aquel momento deseó no haberse comprado la armadura. -Sólo te puedo pagar un día en monedas, pero te prometo que te conseguiré lo restante en trofeos de caza. -Si me vas a pagar en trofeos quiero el doble, además de porque acabo de percatarme que ahora es muy peligroso salir de la ciudad. -Muy bien, te pagaré lo que quieras, pero vámonos ya. -¿Ahora mismo? -Ahora mismo -Bueno vale, un momento que cojo mis cosas.
Graír, de cuarenta años, se equipó y salió de la ciudad en compañía del cazador... --------------------------------- ---
Última edición por dulcepsicopata el Dom 28 Ago 2011, 15:18, editado 5 veces | |
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Zacunismo Caballero
Mensajes : 910 Fecha de inscripción : 05/07/2009 Localización : En Khorinis recordando viejos tiempos Empleo /Ocio : Paladín de rango medio Humor : Que le dice Diego a Gorn: Últimamente te veo más negro (Gothic 4) XD
| Tema: Re: Capítulo VI Dom 27 Feb 2011, 22:40 | |
| Sigue así | |
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xSigmax Sombra
Mensajes : 112 Fecha de inscripción : 29/01/2011 Localización : Limpiando Khorinis Empleo /Ocio : Gothics & Design's Humor : porlaputa.com xdd
| Tema: Re: Capítulo VI Dom 27 Feb 2011, 23:41 | |
| El hecho de no haber alguna especie de pelea hace que uno se envuelva aun mas en la historia Dando cosas tipicas de mundo detalles conocidos de como son en el mundo de Gothic Increible como siempre psicopata! Sigue asi *-* | |
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Antiheroe Mago del Concilio Supremo
Mensajes : 1010 Fecha de inscripción : 05/12/2010 Localización : inchandome de martillo de lou en jakendar Empleo /Ocio : el unico paladin con hacha Humor : No se necesitan gafas para ver lo mal que va el mundo
| Tema: Capítulo VI Lun 28 Feb 2011, 15:59 | |
| buen relato y magnifica historia | |
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