HISTORIA DE MILTENMILTEN, EL CONVICTOPoco se sabe de
Milten antes de que fuera desterrado a la colonia. Sólo que fue detenido por algún crimen (probablemente menor) y que compartió celda con
Diego,
Gorn y
Lester antes de ser arrojado a la colonia del
Valle de las Minas.
Una vez en la colonia, ingresó en el
Campamento Viejo como
Sombra, y que luego hizo una importante misión para los
Magnates del Mineral, lo que le valió para ganarse un ascenso dentro del Campamento. Milten eligió el complicado y duro camino lleno de esfuerzo, sacrificio y práctica de la magia. Cierto fue que, según él mismo reconoce,
Corristo, el líder de los
Magos de Fuego del Campamento, sólo lo admitió como aprendiz por pura diversión, pero eso no impidió que el joven aprendiz de mago se esforzara en sus estudios para mejorar su magia y sus hechizos. También celebraba reuniones ocasionales en un punto determinado del Valle con el resto de sus amigos, Diego, Gorn y Lester.
ENTABLANDO AMISTAD CON EL HÉROE SIN NOMBRELa primera vez que el HSN habló con él fue cuando el recién llegado entró al castillo con el objetivo de entregar al líder de los Magos de Fuego de la colonia una carta de
Pyrokar, líder de los Magos de Fuego del
monasterio de Khorinis. Aquí hubo una confusión, pues la carta de marras estaba dirigida a
Xardas, antaño líder de los Magos de Fuego que crearon la
Barrera Mágica, ahora un poderoso nigromante que vivía apartado de la civilización en una torre en el territorio orco, donde ensayaba su magia negra y buscaba una explicación al desastre de la Barrera; en vez de a Corristo, aunque eso no impidió que el HSN cobrara una buena recompensa por entregar la carta.
La próxima vez que el HSN se encontró con Milten fue en una cripta del círculo de piedras, donde se encontraba uno de los
focos de piedra, protegido por esqueletos y un poderoso
guardián zombi, que derrotaron con sus esfuerzos conjuntos. Más tarde, el HSN encontraría a Milten en la puerta norte del Campamento Viejo, vigilando a los guardias, cuando se derrumbó la
Mina Vieja,
Gomez asesinó a los Magos de Fuego y atacó la
Mina Libre. Milten le previno de acercarse a las puertas y le mandó a preguntar por más información a Diego.
Varios días más tarde, cuando el HSN ya estaba en posesión de
Uriziel y de la
armadura de mineral, el joven mago se encontró con él en el
Campamento Nuevo. El mago ayudó al HSN en un ritual en el cual el poder del
montículo de mineral mágico de los
Magos de Agua pasó a Uriziel, permitiendo así que el HSN pudiera derrotar al
Durmiente y a sus poderosos sirvientes.
MILTEN VA POR SU CUENTA DESPUÉS DE LA CAÍDA DE LA BARRERACuando cayó la Barrera, Milten abandonó el Valle y llegó al monasterio de Khorinis, donde estuvo unos días, pero luego se unió a una expedición organizada por los
paladines, bajo el mando de
Garond, al Valle de las Minas para conseguir mineral mágico para el
rey Rhobar II. Sin embargo, la expedición fue desastrosa, sufriendo terribles bajas a manos de
orcos y del
dragón de fuego Feomathar, quedando buena parte de los supervivientes, Milten entre ellos, asediados en el viejo castillo del Campamento Viejo. No obstante, se volvió a encontrar con el HSN en el castillo, le informó sobre la situación de Diego y Gorn (convictos en la expedición, el primero en la
mina de Silvestro, el segundo en el
calabozo) y ayudó al héroe a liberar a Gorn. Más tarde, el mago volvería al monasterio de Khorinis, unos pocos días después de que
Pedro robara el
Ojo de Innos hechizado por los
buscadores. Él ocuparía el puesto de guardián del monasterio.
MIEMBRO DE LA TRIPULACIÓN DEL HÉROEMás tarde, acompañó al héroe en el mismo barco a
Irdorath, el refugio del líder del
Ejército del Mal, el
dragón muerto-viviente. Allí le ofreció algunos consejos sobre magia y le vendió pociones, así como le enseñó nociones de magia. Después de la derrota del dragón zombi, el héroe le confió el Ojo de Innos, ahora ya sin poder, pues el último dragón carecía del corazón necesario para recargar el poder del amuleto.
Posteriormente, viajó en el mismo barco a
Myrtana, pero por el camino sufrió una dura pérdida: gracias a Xardas, sus runas (así como las de todos los Magos de Fuego y paladines) habían perdido su poder. Así que tuvo que entrenarse en el uso de una pica. No obstante, ayudó al héroe, Diego y Gorn a liberar un pueblo llamado
Ardea en la costa de Myrtana. Luego partió sin un rumbo concreto, en busca de aprender
magia antigua. En Myrtana se encontró con el paladín
Olivier, que le habló de los planes de los Magos de Fuego del
monasterio de Nordmar para recuperar la magia de los paladines, usando los
cálices de fuego. Colaboró en ese proyecto, y los paladines recuperaron su magia. Por otro lado, Milten aprendió la magia antigua y la perfeccionó, convirtiéndose en uno de los magos más sabios y poderosos.