LUKOR
Lukor fue un criminal convicto en tiempos de la Barrera, y uno de los miembros más importantes del Campamento de la Hermandad. Lukor desempeñaba, en el último año de la Barrera, el cargo de gurú, aunque se desconoce qué funciones exactas realizaba en el Campamento. Por su carácter y sus reflexiones lo más probable es que fuese durante mucho tiempo discípulo del segundo del Campamento,
Cor Kalom, lo que explicaría su fanatismo radical. Presenció la gran invocación del
Durmiente tras la que
Cor Angar le dio un grupo de templarios y le mandó investigar en el sistema de cuevas conocido como el cementerio orco. A la altura de la entrada al cementerio, Lukor y los templarios fueron asaltados por un grupo de orcos exploradores. Dentro de la cueva más orcos les esperaban y los templarios fueron muriendo uno tras otro hasta que sólo quedó Lukor. A punto de morir intervino el
Héroe sin Nombre quien le ayudó, por mandato de
Cor Angar, a localizar algún signo o señal del
Durmiente. Cuando ambos llegaron hasta otra cámara funeraria y se dieron cuenta de que allí no había nada, Lukor se volvió loco y creyó que la presencia del
Héroe sin Nombre era el motivo por el que el
Durmiente no se había revelado. Creyendo que un sacrificio humano contentaría al
Durmiente, Lukor intentó matar al
héroe, sin embargo éste era mucho más hábil y acabó con su vida.
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